Desde hace un tiempo, las revistas de buen contenido periodístico me importan cada vez más por su diagramación y presentación gráfica. Los textos mal ordenados, con tipografía inadecuada, con recuadros desordenados me indican que existe una supervisión editorial no muy confiable y probablemente obsoleta. La revista inglesa MONOCLE creo que es la que hoy mejor resuelve el cómo presentar reportajes políticos y de tendencias internacionales de un modo amable, jerarquizado, capaz de destacar lo relevante y contextualizar los antecedentes. Equilibra diseño y contenido de un modo asombroso y eficaz, sin exceso de onda ni gritos visuales para llamar la atención. Es una prueba contundente de que el periodismo escrito necesita de buenos diseñadores gráficos cerca, sobre todo en estos tiempos.