A horas de las elecciones, esta crónica cuenta cómo candidatos y candidatas de Apruebo Dignidad cerraron su ciclo de propaganda electoral y el de su candidato presidencial, Gabriel Boric, con una “caravana distrital” por Cerro Navia, Renca, Conchalí y Recoleta.
Por Sofía Martínez, Valentina Orellana y Francisco Romo*
*Esta crónica fue realizada por estudiantes de segundo año de la carrera de Periodismo de la Universidad Alberto Hurtado, en el marco del Taller de Crónicas y Entrevistas, impartido por el profesor Roberto Herrscher.
El sábado 13 de noviembre, el Frente Amplio y el Partido Comunista (PC) convocaron a una “Caravana Distrital” que se desarrolló alrededor de cuatro comunas del distrito 9: Cerro Navia, Renca, Conchalí y Recoleta.
Ese día, en Conchalí, el ambiente se notaba precario en un inicio. El Parque Arboleda de El Cortijo se encontraba con baja audiencia, casi desierta, sin mucho ánimo de celebración. Antes de que llegaran los candidatos, se encontraban sentados en una esquina de la plaza un grupo de vecinos con banderas del diputado comunista y hoy candidato a la reelección, Boris Barrera, que esperaban su llegada cantando canciones de Illapu, mientras que otros fumaban o bailaban al son de la música.
Gloria, una vecina de El Cortijo, fue la única que quiso dar su opinión, señalando que Barrera era “un gran vecino”, además de “buen servidor público” y que “merece totalmente salir reelecto” junto al candidato presidencial del pacto Apruebo Dignidad, Gabriel Boric. Ella estaba segura de que los votos de todos los vecinos presentes iban para ellos.
En un escenario móvil montado en un camión y una caravana de autos con globos rojos, llegaron poco después los diputados Karol Cariola y Boris Barrera, ambos del PC, para iniciar la actividad. Boric no podía: se encontraba recién abandonando su cuarentena por Covid-19. Ellos debieron tomar el mando del acto y, rodeados de música en vivo y discursos, dieron inicio al fin de campaña. Se notaba el fervor en los presentes. Vitoreaban el himno del PC, al tiempo que los cánticos hacia los diputados se hacían escuchar con fuerza.
Ahí estaba Jeannette Jara, ex subsecretaria de Previsión Social durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet y actual administradora del municipio de Santiago, quien comentó que esperaba que Chile no olvidara su historia, y que “el fascismo no podía volver a gobernar el país”. Que el miedo la dominaba al pensar que el candidato de extrema derecha, José Antonio Kast, pueda tener siquiera alguna oportunidad de ganar las elecciones, pero que toda su fe y esperanza estaban puestas en el pacto Apruebo Dignidad, por sus capacidades y lo propuesto en su programa de gobierno.
“La lucha no puede ser en vano”
La actividad comenzó con música en vivo de un grupo conchalino, que con sus cumbias hicieron bailar a jóvenes, adultos mayores e incluso a los diputados que eran animados por quienes los rodeaban. Luego, llegó el momento de los discursos. Cariola subió al camión en medio de aplausos e incluso algunos halagos un tanto inapropiados.
Dijo que no habían sido días fáciles. Por una parte, por la intensidad en el desarrollo de la acusación constitucional contra el Presidente Sebastián Piñera; también por el propio desgaste desde el inicio de la campaña, “proceso que se ha visto fuertemente confrontado con los dichos de la derecha, acusando de delincuentes a quienes se han encargado de representar a los chilenos, y de hacer vista gorda a la verdadera delincuencia que ocurre dentro del mismo gobierno”.
“La lucha social y política que hemos dado no puede ser en vano, no puede quedar solo en una lucha. El 18 de octubre [de 2019] no se puede transformar en un hito más en la historia de Chile; tiene que ser el momento de inflexión para que Chile sea distinto, para que sea más democrático, para que en nuestro país, de una vez por todas, los que más tienen paguen los impuestos que corresponden”, señaló Cariola en su discurso en Conchalí.

Diputada Karol Cariola da un discurso de cierre de campaña en el escenario móvil. (Foto: Valentina Orellana)
Boric culminó su campaña presidencial días después, el jueves 18, en Casablanca, en la Región de Valparaíso. Allí dio un discurso final recordando momentos importantes en su trayectoria política, como cuando fue dirigente estudiantil en 2012, hasta sus últimas apariciones como diputado, y ahora en su carrera por el sillón presidencial.
“Lo que ha gritado el pueblo de Chile en los últimos años es justamente eso: que no estamos solos, que nos encontramos y no nos vamos a soltar. Y que no estamos acá solamente para decir que hay cosas que no queremos, sino porque tenemos un proyecto que construir en positivo”, dijo Boric ese día.