Cuatro integrantes del canal fueron sancionados por infringir el artículo 161-A del Código Penal al grabar una conversación privada.
El 28 de agosto de 2003 el programa “En la mira” de Chilevisión emitió un capítulo que denunciaba irregularidades en la entrega de licencias médicas. En su despacho del Instituto Psiquiátrico José Horwitz Barak, la doctora María Luisa Cordero fue grabado con cámara oculta para probar su participación en este tipo de prácticas.
Tras casi nueve años de proceso, la Corte de Apelaciones de Santiago confirmó la condena al equipo del canal, integrado por los periodistas Jaime Lara, Raúl Poblete, Eugenio Salinas y Patricio Caldichoury, como coautores del delito descrito en el artículo 161 del Código Penal, que sanciona la utilización de este recurso para capturar y difundir conversaciones privadas.
El fallo de la Corte de Apelaciones reconoció que Cordero otorgaba licencias “sin que se reúnan las condiciones necesarias para ello” y que este acto reviste “interés público”.
El fallo reconoció que Cordero otorgaba licencias “sin que se reúnan las condiciones necesarias para ello” y que, en su dimensión noticiosa, este acto reviste “interés público”; sin embargo, su difusión transgredió el artículo 19 número 4 de la Constitución que asegura a todas las personas “el respeto y protección a la vida privada y a la honra de las personas y su familia”.
A juicio de la Corte de Apelaciones, esa garantía constitucional se respalda en el artículo 161-A del Código Penal, y “constituye un límite a la libertad de expresión” consagrada en el numeral 12 de la Constitución.
Los sentenciados deben cumplir una pena de 61 días de reclusión menor y pagar solidariamente cinco millones de pesos a la querellante; la Corte, sin embargo, les concedió la “remisión condicional de la pena, debiendo someterse al control y supervigilancia de la sección correspondiente de Gendarmería de Chile por el lapso de un año”.
Tras el fallo, la doctora Cordero declaró a La Cuarta: “Estoy muy contenta que se haya hecho justicia”. También agradeció a su abogado por demostrar que “ellos son los delincuentes”, en alusión a los periodistas condenados. En conversación con Diana Massis, en radio ADN, reconoció: “Todos hemos dado licencias falsas, hasta los decanos de medicina”.