“Esto es lo que se está sembrando en el país, aún hay que esperar la cosecha”.


María Teresa de Jesús Oporto Rubilar, 71 años. Jubilada, vive en La Florida. 

Por Antonia Pérez y Karen Vilches          


De todo corazón pienso que, aunque no hubiera existido el estallido social, quien estaría ahora con la banda presidencial de nuestro país seguiría siendo Gabriel Boric, porque esto le sirvió al anterior gobierno para darse cuenta de que no éramos el oasis que tanto nos llamaron.  La gente ahora está más despierta, ahora tiene libertad de expresión.

Si tuviera que marchar por él, si tuviera que defenderlo como lo hice con Allende, lo haría. Andaría con lienzos sin problema. Aunque las marchas ahora están muy violentas y por mi edad me daría miedo, pero por apoyar estaría ahí definitivamente; de igual manera que protestaría para que se escuche al pueblo, si es que comienza otra vez el hecho de que no les están tomando atención, porque si Boric no empieza a cumplir lo que está diciendo, yo creo que todo el pueblo estará descontento, ya que es nuestra única fe para cambiar a este país.

Siento que el presidente Boric tiene muchas metas buenas y está luchando por ellas. Aún siento que no ha hecho mucho, pero no se le puede pedir demasiado porque recién lleva 100 días de su mandato. Todo esto es lo que se está sembrando en el país, aún hay que esperar la cosecha para tener una opinión con más fuerza de lo que él está haciendo y calificar su mandato.

Es como preguntarse sobre los gobiernos anteriores ¿Quién avanzó más? Nadie.

Manos de María Oporto

Manos de María Oporto

Tengo fe en él, siento que cumplirá su palabra. Ha hecho poco, sí, siento que lamentablemente es una marioneta para los demás que están en el gobierno, él es joven y es difícil llevar a un país entero. No quiero decir que no puede o no hará nada, pero hay que esperar, hay que tener fe. Él tiene que luchar por el país, no por los partidos. Últimamente los partidos tienen más poder o influencia y va a tener que separar las cosas y saber luchar por su pueblo, quien está latente y expectante ante lo que pasa y pasará.

Antes los estudios no eran importantes, yo por ejemplo no llegué a terminar la enseñanza básica. Al sistema no le interesaba, le convenía más que uno trabajara. Empecé a trabajar desde muy pequeña, a los 11 años, ahora tengo 71. No recuerdo haberlo visto de una forma mala: de hecho, para mi edad era bastante madura y sabía que era mi deber ayudar a mi madre. Ahora es primordial el estudio, hay mucho más apoyo y motivación para los jóvenes. Tiene que mejorar, sí.

Hay que moverse para darle una educación de calidad para el futuro de Chile.  Por ejemplo, me gustó ver que Boric escuchó a los estudiantes y aumentó la beca de alimentación para los jóvenes. Me pone muy feliz porque tengo nietos que se beneficiaron y a veces es de gran ayuda.

Espero que se vayan viendo más avances en la educación y en todos los ámbitos, que le den mejores comidas y lugares donde estudiar a los niños. Espero que se acuerde que también prometió eliminar el CAE.

Si tuviera a Boric frente a mí le daría dos consejos: uno de ellos sería que se preocupe mucho más de la delincuencia porque me ha tocado vivir en carne propia lo que es asustarse por una bala loca en medio de la noche, y el numero dos sería que vea bien por quiénes se rodea. No olvidemos que el que está a tu lado puede ser un dictador.

Ojalá logre un país más justo, con menos delincuencia y más unión. Un lugar sin miedo, sin odio, sin divisiones y no privilegiando a unos pocos.