La fotógrafa y su retratada, Bieber y Aisha | Foto: LUCCAdigitalPHOTOfest, Flickr
Al observar la fotografía de Aisha, una mujer afgana mutilada por su marido, es inevitable evocar otro rostro de belleza indescifrable: Sharbat Gula. La primera, Aisha, fue portada de revista Time el 2010. La segunda, portada de la National Geographic de junio de 1985. Aisha fue retratada por la sudafricana Jodi Bieber; Sharbat, inmortalizada por Steve McCurry.
Bieber comenta este vínculo ineludible. La ganadora del World Press Photo 2010 se encuentra en Chile para inaugurar la muestra de esta selección en la Sala de Arte de la Fundación Telefónica, que estará abierta entre el 8 de julio y el 7 de agosto. Ahora se encuentra en el auditorium de la Universidad de las Américas, en una charla con periodistas y fotógrafos, exhibiendo una pizca de su portafolio y respondiendo dudas y emplazamientos de los asistentes.
Porque la fotografía de Aisha, que le valió el premio del WPP, fue objeto de polémica. El titular de revista Time alertaba: “¿Qué pasa si dejamos Afganistán?”, enardeciendo a los opositores de la invasión militar, convencidos de que el medio promovía una propaganda capciosa. Las organizaciones feministas, en tanto, criticaron la utilización de la mujer afgana, la destrucción de su dignidad, el sitial incómodo que le dieron.
La muestra del World Press Photo se exhibirá en el edificio de la Telefónica, entre el 8 de julio y el 7 de agosto.
Jodi Bieber cree que el titular ayudó para expandir la fotografía; dice que la retratada no fue obligada con una pistola a tomarse la foto; describe el momento con ella como un proceso de curación; y confía en que otras mujeres se identifiquen con su situación, su dolor, su sanación. Por eso en la pantalla despliega el retrato de Aisha mutilada (viviendo en su país natal) y el de Aisha con prótesis (viviendo en Nueva York).
“Ninguna fotografía vale la vida de una persona”, dice Bieber para trazar los límites de su ética. Pese a la porfía de los asistentes a su clase magistral, evita pronunciarse sobre el futuro de Afganistán. Sólo estuvo 10 días ahí para retratar mujeres de variada índole —política, artistas, deportistas, Aisha— y cita a su traductor en ese periplo para formular un deseo: “Él quería que las tropas estadounidenses se queden”.
Plantea que en el mundo digital todos son fotógrafos y sugiere el formato multimedial como el horizonte para contar historias en internet. Un periodista le pregunta si en Chile ha podido fotografiar algo de la efervescencia estudiantil de estos días. “Se lo dejo a ustedes”, respondió. “Este es su país”.
El siguiente video muestra uno de los trabajos de Jodi Bieber. Se llama “Real Beauty” y muestra a mujeres normales, alejadas del estereotipo del 90-60-90, endiosado por la publicidad. “Sentí una gran necesidad de crear un cuerpo de trabajo que fuera en contra de lo que los medios definen como belleza”, escribió en su sitio web. Acá puedes ver el resultado.