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“De Cabeza”, una revista hecha por amor al fútbol (más que a la camiseta)

Por ~ Publicado el 8 enero 2015

Literatura, fotografía e historias confluyen en De Cabeza, medio que sus creadores definen como una “revista atemporal”. Su director, Cristóbal Correa, dice buscar reivindicar la imagen del hincha chileno: “Llegó el momento de respetar a los lectores, que no son esos termocéfalos que pretenden caricaturizar algunos medios”.

En la página 10 el “Polaco” Goldberg declara su “admiración por el pueblo judío”, y en la página 51 el periodista Leonardo Burgueño dibuja su 11 ideal, una formación que combina glorias del fútbol —Mario Kempes, Nelinho— con figuras artísticas y culturales como Fito Páez o Eduardo Sacheri, “un 8 pensante”. Entremedio, muchas fotografías en color y en blanco y negro, ocupando toda la página: el Pibe Valderrama, Roberto Baggio, Di Estefano, Maradona. Y, también, mucho texto: un fragmento de Soy de Católica, de Diego Zúñiga; una crónica sobre Palestino, “un club único en el mundo”; una columna de Ina Groovie donde escribe que “el fútbol no es cosa de géneros, sino de lazos”, el de ella con su padre, el de ella con los que vendrán.

Una descripción somera, pero que intenta delinear el espíritu de De Cabeza, una nueva publicación digital que pretende aproximarse al fútbol lejos de la vertiginosa contingencia del fin de semana, desde una perspectiva más pausada, “con pantalones largos”, como dicen.

“Nosotros somos una respuesta a una necesidad”, dice en un correo su director, el abogado Cristóbal Correa. “La necesidad de que la prensa, los medios, traten a sus lectores con respeto, entregándoles material de calidad para que se abra el debate sobre temas tan trascendentales como la xenofobia, el antisemitismo, la lucha de clases, la diversidad, la participación de la sociedad civil, el respeto por lo simple, la dignidad de lo humilde, y usamos un vehículo tan potente como el fútbol para llegar a la mayor cantidad de gente posible”.

Para Correa la misión es simple “y quijotesca”: no subestimar al lector y reivindicar la imagen del hincha, lejos de la idea de un “puñado de bárbaros” sedientos de “datos y resultados”.

Para Cristóbal Correa la misión es simple “y quijotesca”: no subestimar al lector y reivindicar la imagen del hincha, lejos de la idea de un “puñado de bárbaros” sedientos de “datos y resultados”.

Actualmente el equipo de De Cabeza está integrado por diez personas cuyas funciones ya están delimitadas: director, editores, periodistas, directores de arte y audiovisual, encargado del sitio web y de las redes sociales (un Instagram y perfiles en Twitter y Facebook, donde ya superan el millar de seguidores). Por ahora la revista es sólo digital pero Cristóbal Correa asegura que dado el inusitado interés inicial han recibido peticiones para salir al papel.

“La experiencia del papel —escribe Correa— si bien va en retirada en la industria, te da otra dimensión y te vincula de otra forma con nuestros contenidos. Pero hoy el mercado es súper cruel, la inversión inicial es alta e impide a un montón de medios de altísima calidad salir adelante, sobre todo cuando propuestas como la nuestra, inéditas en Chile, innovadoras, deben batallar con lo que dicta el mercado para acceder a financiamiento y avisaje”.

El director de De Cabeza anuncia que la revista circulará cada tres meses para trabajar con cuidado los temas y el diseño. “Hay algo a lo que no queremos renunciar: la calidad del contenido y nuestra identidad visual, obra de nuestro Director de Arte, Nicolás Parraguez. Y eso lo vamos a hacer por respeto a nuestros lectores, que se merecen una revista de esta calidad”, afirma.

—¿De qué modo están financiando el proyecto, aparte de la publicidad?
Por ahora con recursos propios, pero estamos explorando el crowdfunding y otras vías de financiamiento alternativo. Evaluamos también, como te mencioné antes, la suscripción con el fin de imprimir la revista para quienes quieran tener una experiencia diferente. Estamos craneando también una línea de productos De Cabeza, para plasmar nuestra identidad por otras vías.

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—En De Cabeza también hay cuentos. ¿Será una sección permanente?
Así es, será una sección permanente y está a cargo de Nicolás Vidal, escritor y abogado que ha publicado ya algunas obras. En este espacio autores chilenos y extranjeros podrán publicar sus obras para darlas a conocer a nuestros lectores. Tenemos un buen número de cuentos y relatos que de seguro se van a disfrutar mucho. Ha generado harto interés esta sección, algo impensado en un país que, se supone, no lee, o al menos es lo que nos quieren hacer creer.

—La revista incluye una voz femenina, Ina Groovie, pero el grueso de las plumas son hombres. ¿El fútbol, al menos en los medios, sigue siendo un feudo masculino?
No sólo masculino: ultra machista. Lo que habla de la necesidad de abrir espacios a las mujeres no sólo en estas temáticas, si no que en todos los espacios de debate que en Chile cada vez son más restringidos. En 10 días, desde el lanzamiento, más de 5.000 personas han leído la revista, más de un cuarto de la gente que nos lee son mujeres, eso es muy potente y nos indica que en la revista vamos en la dirección correcta. Aquí hay espacio para que todos nuestros lectores, especialmente las mujeres, participen.

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—¿A qué se refieren al hablar de una “revista atemporal”?
En el www.decabeza.cl no van a encontrar contingencia. No están los goles, ni la tabla de posiciones del campeonato, ni el último escandalillo farandulero. En De Cabeza van a encontrar historias. Tenemos una predilección por esa maravillosa máquina de ficciones que es el fútbol. Hay cariño y respeto por los llamados “equipos chicos”, los que no salen usualmente en las portadas de los medios. Nosotros somos atemporales porque tratamos estos temas con humildad, con una dedicación tremenda, con amor al fútbol más que a la camiseta, y ese rol hoy en Chile no lo está cumpliendo ningún medio. Llegó el momento de respetar a los lectores, que no son esos termocéfalos que pretenden caricaturizar algunos medios.

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